CHAT

domingo, 14 de abril de 2013

Editorial - TH Magazine Nº3 Marzo 2013



Editorial
Hola a todos, bienvenidos a nuestra entrega número 3. Estamos felices de compartirla, y de los aportes que hemos ido recibiendo.
Hoy le daba vueltas a la Editorial, y escuché una frase que me enganchó: “Sabes por qué en este tiempo no hay héroes: porque las personas están esperando a que quién lo es, meta la pata” Entonces pensé en nuestros cuatro muchachos, en sus aciertos y errores. Pensé en lo mucho que un héroe puede ser idolatrado, y en lo que necesitamos de figuras a las que seguir y en las que depositar nuestras ilusiones. No es malo tener ídolos, lo malo es olvidar que son personas como nosotros, que cometen errores, y que más veces de las que quisiéramos, hacen algo que nos lleva a replantearnos nuestra adoración por ellos. Creo que como en todo, hay ídolos de cartón, personas que están ahí para generar ingresos en el bolsillo de unos cuántos, pero también creo en aquellos —que como nuestros cuatro chicos— han intentando hacer realidad un sueño, una ilusión. Todos tenemos ilusiones, más ambiciosas o más pequeñas. Los ídolos son quienes nos llevan a creer en nuestra propia capacidad para realizarlas.
Ahora me pregunto: ¿Cuántas veces somos nosotros mismo los verdugos de una ilusión? La propia o la ajena. Sólo con destacar lo negativo por encima de lo positivo, o por simplemente pasar mirando sin atrevernos a decirle a aquél “que hace tan bien” algo, lo mucho que nos gusta; quizás esa persona nos está entregando su creación como una ofrenda. Debemos aprender a valorar el trabajo de aquellos que nos rodean, porque en ese valor estamos todos implicados. No hay que sentir miedo o reparo de expresar con respeto nuestras opiniones, podemos estar en desacuerdo con algo, pero hay que saber dirigir nuestros pensamientos para que los aportes sean constructivos.
Y entonces: ¿Sabremos valorar lo que Tokio Hotel nos tiene preparado?
Probablemente habrá opiniones de todos los tipos, pero sería interesante recordar que hay horas de trabajo en cada arreglo musical, en cada grabación ¿Qué ganan dinero con ello? Sí, desde luego, pero el dinero es un elemento al que no deberíamos darle más valor que a las personas. El arte, la creación; es el verdadero valor de un ser humano, no cuánto gana con ello, sino cuánto nos hace sentir; porque finalmente son las emociones el combustible real de nuestra existencia.
Alguien me dijo: en la vida un día estás arriba y un día abajo ¡Cuánta razón tenía!
Normalmente la vida se ve en directo, no sabemos lo que nos tocará enfrentar o cuánto nos puede costar dar un paso; ya sea por razones externas o demasiado internas —nadie está libre de sí mismo— Por eso creo que los héroes están a nuestro alrededor, entre las personas que nos acompañan y que cada día nos dan una alegría. Entre los que luchan por sacar su propia vida adelante, o los que están preparando un disco para que lo conozcan sus fans. Los héroes son de carne y hueso. No deberíamos esperar constantemente a que metan la pata, deberíamos ayudarlos a levantarse cuando lo hagan, porque ellos son exactamente como nosotros, sólo que más expuestos.
 No digo con esto que no deba existir la crítica, después de todo es una guía importante, pero hay que saber expresarla, porque nuestra forma de decir nos valida o nos invalida.
Nuestros cuatro chicos son nuestros héroes, nuestros ídolos; y a los ídolos hay que amarlos. Pero amar implica comprender y disculpar, ser capaz de saber que los errores existirán.
Hasta los mejores héroes son imperfectos.

Anyara

No hay comentarios:

Publicar un comentario